La colección Dior Haute Couture Spring Summer 2021 devela una nueva representación del misticismo y la belleza del tarot, ahora plasmados en lujosos atuendos de noche.
Dicha serie se ajusta impecablemente a la premisa destacada por la casa de modas: “Christian Dior era un apasionado de las artes adivinatorias y de las señales del destino. Su autobiografía está sembrada de encuentros a menudo providenciales con personajes visionarios”.
De este modo, la diseñadora Maria Grazia Chiuri, fascinada por El castillo de los destinos cruzados de Italo Calvino, retrató al elemento proverbial como un viaje onírico que recorre cada una de las cartas diseñadas por el legendario Visconti-Sforza a mediados del siglo XV.
Aunque no existe un mazo completo de esta baraja, denominada en un principio truinfi, por triunfos, Dior recurrió a Roger Wick, director del Departamento de Manuscritos Medievales y Renacentistas, y comisario de la Morgan Library de Nueva York para repasar los detalles de cada carta desde la historia.
La belleza del tarot de Viscon-Sforza radica en el arte de los símbolos plasmados en los rasgos, los gestos y la vestimenta de cada personaje. De acuerdo a Wick, una de las características de este mazo antiguo es que las mujeres tenían una representación importante y equitativa en 50/50 a comparación con la de las figuras masculinas.
A su vez, resalta que el vestuario retratado en cada carta es un documento que refleja el contexto social y político de la época en la que fue diseñada; es por ello que se le adjudica su origen entre los años 1440 y 1460.
Con estos elementos como base, Dior presentó la sofisticada colección mediante un cortometraje de 15 minutos dirigido por el director italiano Matteo Garrone; con la finalidad de representar “la belleza mágica de las artes adivinatorias” mientras invita a la exploración y afirmación de cada identidad.
El tarot en las artes y la literatura
Además de Dior y Grazia, numerosos creadores han tomado al tarot y su simbología como numen, guía y componente fundamental para su sentir y hacer cotidiano; con ello, han legado al arte y la historia grandes registros del poder espiritual de esta baraja milenaria.
De ellos sobresalen, en literatura, los escritores Philip K. Dick, Sheila Heti, Sylvia Plath, Shirley Jackson, o Jorge Luis Borges, quienes dejaban al azar sus decisiones creativas para la realización de cada obra.
Por ejemplo, de acuerdo al libro El tarot creativo, una guía moderna para una vida inspirada (2019) de Jessa Crispin, Phili K. Dick escribió El hombre en el castillo, tirando monedas sobre la mesa, motivado por el I-Ching, conjuro adivinatorio chino basado en el azar.
Asimismo, describe que Plath utilizó las cartas del tarot para componer, al menos, los tres poemas de Ariel, y William Butler Yeats usó la imaginería tarotista en toda su obra, incluida Sangre y luna.
En cuanto a las artes plásticas, grandes nombres han recreado la imagen de las cartas que conforman el tarot; una de las representaciones más notables es el Black Power Tarot de King Khan, Alejandro Jodorowsky y Michael Eaton, en ella los arcanos representan a 19 músicos y dos magos afroamericanos.
Junto a esa baraja destacan las diseñadas por Remedios Varo, Leonora Carrington, Salvador Dalí, Pamela Colman Smith, Lay Frieda Harris, Arthur Rackham, Linnea Gits, Kim Krans, y Ariel Harts, por mencionar algunos.
En el caso de Linnea Gits, su baraja sigue el simbolismo del tarot de Rider-Waite-Smith, y espiritualmente sigue otras barajas del tarot anteriores adaptadas al folclore local.
Mientras que las cartas diseñadas por Ariel Hart, ofrece una estética psicodélica y colorida de la baraja, inspirada en el trabajo de Lisa Frank. En ella, los protagonistas son animales, como perros y ballenas felices.
